Castillo de Orava (eslovaco: Oravský hrad, alemán: Arwaburg, húngaro: Árva vára) es un castillo situado en una roca alta sobre el río Orava en el pueblo de Oravský Podzámok, Eslovaquia. Se considera uno de los castillos más bellos de Eslovaquia. El castillo fue construido en el Reino de Hungría en el siglo XIII. Muchas escenas de la película de 1922 Nosferatu se filmaron aquí, el castillo representa el castillo de Transilvania del conde Orlok.

El castillo de Orava se encuentra en el sitio de una antigua fortificación de madera, construida después de la invasión mongola. de Hungría de 1241. Su historia sigue un patrón familiar de construcción, destrucción, reconstrucción, incendio, varias posesiones y disputas territoriales. El diseño original era de estilo románico y gótico; más tarde fue reconstruido como una estructura renacentista y neogótica, abrazando la forma del espolón de 520 metros sobre el que se posa.

La familia del magnate minero Thurzo, que se hizo cargo a mediados del siglo XVI, fue responsable de una gran cantidad de trabajos de reconstrucción, aunque su forma actual no se finalizó hasta 1611. Se incendió nuevamente en 1800, después de lo cual ya no se utilizó como residencia. Después de un período de ruina que data hasta la Segunda Guerra Mundial, el castillo se convirtió en monumento nacional.